Moroi | REVIEW
Un descenso al infierno personal.
Lanzado el 30 de abril de 2025 para PC a través de Steam, Moroi es una aventura de acción y horror desarrollada por Violet Saint y publicada por Good Shepherd Entertainment. Inspirado en el folclore rumano y en las obras surrealistas de David Lynch, el juego nos sumerge en un mundo retorcido y oscuro, donde la realidad se distorsiona y la locura acecha en cada rincón. Con una estética grimdark y un sentido del humor macabro, Moroi propone una experiencia única y perturbadora para los amantes del género.
Una narrativa fragmentada y enigmática
Acá despertamos en una prisión decadente dentro del «Cosmic Engine», una especie de infierno personalizado donde la verdad es una ilusión y la paranoia es constante. Sin recuerdos de nuestro pasado, debemos enfrentarnos a una serie de desafíos y criaturas grotescas mientras intentamos escapar de este mundo de pesadilla. La historia se presenta de manera fragmentada, a través de pistas ambientales, diálogos crípticos y encuentros con personajes excéntricos. Esta narrativa deliberadamente vaga puede resultar confusa, pero también invita a la interpretación y al análisis, ofreciendo múltiples finales según nuestras decisiones.
Jugabilidad: entre el hack-and-slash y el surrealismo
La jugabilidad combina elementos de acción, exploración y resolución de acertijos. Desde una perspectiva isométrica, enfrentamos combates frenéticos contra enemigos deformes utilizando un arsenal de armas inusuales, como una espada con dientes de pato parlante o un cañón en lugar de brazo. Los acertijos, por su parte, son tan grotescos como el entorno: beber sangre para abrir puertas, inducir el vómito para revelar caminos ocultos o escarbar en las entrañas de cadáveres para encontrar objetos clave. Aunque estas mecánicas aportan variedad, la falta de indicaciones claras puede generar frustración en algunos momentos.
Un diseño visual impactante y perturbador
Visualmente, Moroi destaca por su estética grimdark y su atención al detalle. Los escenarios están llenos de engranajes oxidados, carne putrefacta y estructuras retorcidas que refuerzan la sensación de estar atrapado en una pesadilla. Los efectos de iluminación y las animaciones contribuyen a crear una atmósfera opresiva y surrealista. Las criaturas que encontramos son tan grotescas como memorables, y cada una parece salida de una mente atormentada. Este apartado visual, aunque no busca el realismo, logra sumergirnos completamente en el mundo distorsionado del juego.
Sonido: una ambientación sonora inquietante
El diseño de sonido es otro de sus puntos más picantes. La banda sonora combina drones oscuros, cantos religiosos distorsionados y efectos ambientales que aumentan la tensión y la sensación de incomodidad. Los sonidos de los enemigos, los crujidos del entorno y los murmullos lejanos contribuyen a crear una atmósfera sonora envolvente y perturbadora. Aunque no hay voces ni diálogos hablados, el uso del sonido es efectivo para transmitir emociones y reforzar la narrativa.
Rejugabilidad y dificultad: una experiencia desafiante
Puntualmente se ofrece una experiencia de entre 6 y 8 horas, dependiendo de nuestra habilidad y de cuánto tiempo dediquemos a explorar y resolver los acertijos. La presencia de múltiples finales y secretos ocultos incentiva la rejugabilidad, aunque la dificultad de algunos puzzles y la falta de orientación pueden desmotivar a ciertos gamers. El combate, aunque satisfactorio, puede volverse repetitivo en algunos momentos, y la curva de dificultad no siempre está bien equilibrada.
Conclusión de CDF Gaming
Moroi es una obra que desafía las convenciones del género, ofreciendo una experiencia intensa y perturbadora que no deja indiferente. Su narrativa críptica, su estética grotesca y su jugabilidad poco convencional lo convierten en un título que, aunque no exento de fallos, merece ser experimentado por aquellos que buscan algo más que el típico juego de acción o terror. Una propuesta valiente que demuestra que aún hay espacio para la originalidad en la industria.
Nota del redactor
7.5
