Capcom Fighting Collection 2 | REVIEW
Un regreso con nostalgia y precisión.
Este 16 de mayo de 2025 Capcom Fighting Collection 2 llegó a PC, PlayStation 5, Xbox Series X|S y Nintendo Switch como un nuevo homenaje a los salones arcade de los 90 y principios del 2000. Esta antología reúne otros diez títulos clásicos de peleas de Capcom que no habían formado parte de la primera entrega, con un enfoque que no solo apela a la nostalgia, sino que también intenta restaurar el prestigio de algunos juegos más de nicho que nunca habían tenido una reedición moderna. Entre ports refinados, netcode con rollback y un museo digital repleto de contenido, Capcom Fighting Collection 2 es tanto un rescate histórico como una propuesta jugable sólida para los fans del género.

Un museo interactivo de los años dorados
La colección incluye títulos como Capcom vs SNK: Millennium Fight 2001, Red Earth, Power Stone 1 y 2, Street Fighter Alpha 3 UPPER, Project Justice, y la joya inesperada Plasma Sword: Nightmare of Bilstein, entre otros. Esta selección no solo está cargada de carisma, sino que también muestra la diversidad de estilos y experimentación que Capcom desplegó durante dos décadas. La interfaz de la colección es clara y moderna, con un sistema de menús intuitivo que permite acceder rápidamente a cada juego, ya sea para partidas casuales o competencias en línea.
Gameplay fiel, pero con modernizaciones necesarias
Cada juego incluido mantiene su gameplay original con una fidelidad absoluta, respetando la lógica de cuadros, el ritmo de los combos y los inputs técnicos. Pero no se queda solo en lo retro: Capcom Fighting Collection 2 incorpora funciones modernas como “quick save/load”, rebobinado, filtros visuales personalizables y, lo más importante, netcode con rollback, que garantiza una experiencia multijugador fluida. La opción de crear lobbies privados o unirse a partidas ranked facilita el matchmaking sin importar el título que elijamos.

Los controles son plenamente personalizables, tanto en consola como en PC, lo cual permite adaptar la experiencia a arcade sticks, pads modernos o incluso controles tipo fightpad. En Project Justice, por ejemplo, los combos aéreos y ataques en equipo fluyen perfectamente, incluso para nuevos jugadores que descubran estos sistemas por primera vez.
Gráficos en pixel art restaurados con respeto
Visualmente, cada título mantiene su pixel art original, pero se ofrecen varias opciones de presentación: desde el aspecto CRT de los arcades hasta una limpieza de imagen en HD sin alterar los sprites. El trabajo de restauración es notable, especialmente en juegos como Power Stone, donde los detalles de los escenarios, los efectos especiales y las animaciones siguen sorprendiendo. En la Switch, el modo portátil mantiene un rendimiento estable en todos los juegos, lo cual no era menor considerando las diferencias de arquitectura entre plataformas.
Sonido original y coleccionables musicales
Capcom también restauró las bandas sonoras originales de cada título, e incluso incluyó versiones alternativas o remasterizadas en ciertos casos. Las melodías de Street Fighter Alpha 2 Gold suenan tan intensas como siempre, y los efectos de voz, explosiones y ataques especiales mantienen su impacto. En el “Museo Capcom” se pueden desbloquear cientos de pistas, arte conceptual, flyers originales y documentos de diseño, lo cual convierte a esta colección en una especie de enciclopedia interactiva.

Rejugabilidad para todos los perfiles
La propuesta no solo es disfrutable por coleccionistas o fans veteranos: también es ideal para nuevos jugadores que quieran adentrarse en la historia del género. Cada juego tiene desafíos únicos, personajes con mecánicas particulares y estilos gráficos que varían de lo caricaturesco a lo más experimental. Algunos como Plasma Sword: Nightmare of Bilstein, que originalmente era exclusivo de arcades, representan una experiencia completamente nueva para la mayoría de los jugadores occidentales.
Además, la posibilidad de jugar en línea le da una vida útil prolongada. Si bien no todos los títulos tendrán una comunidad activa permanente, los principales (como Capcom vs. SNK: Millennium Fight 2000 Pro) ya tienen una base de jugadores sólida. La inclusión de tablas de clasificación globales también aporta un incentivo competitivo.
Dificultad desafiante y ajustable
Muchos de estos juegos eran conocidos por su dificultad agresiva, algo típico de los arcades donde el objetivo era que insertes otra ficha. Afortunadamente, todos los juegos permiten modificar la dificultad, la velocidad y los créditos disponibles, adaptándose tanto al jugador casual como al más técnico. También se incluyen tutoriales básicos sobre los sistemas de cada juego, aunque en algunos casos se sienten algo escuetos para quienes no están familiarizados con las mecánicas más complejas.

Conclusión de CDF Gaming
Capcom Fighting Collection 2 se posiciona como una curaduría de obras que, de otro modo, seguirían relegadas al olvido o al acceso emulado no oficial. El paquete es robusto, variado, visualmente encantador y jugablemente vigente. Si bien se podría pedir una mayor cantidad de extras en formato video (como entrevistas o documentales), lo que ofrece es suficiente para justificar su existencia, especialmente para quienes crecieron con estas franquicias o quieren explorar lo que Capcom produjo más allá de Street Fighter II.
Nota del redactor
8.5/10